miércoles, 20 de agosto de 2008

RELATOS - El Camino de San Isidro

RELATO - El Camino de San Isidro

EL CAMINO DE SAN ISIDRO

Manuel viajaba por el camino desolado que lleva a San Isidro. Pero talvez no era tan desolado el camino.

Manuel Suazo iba por la carretera que lleva a San Isidro. Era una noche fria y lluviosa. Cada vez se le hacia mas dificil ver. Los parabrisas no estaban ayudando y la poca iluminacion de la carretera lo hacia casi imposible. "Desearia haber tomado un avion" penso Manuel. Manuel trabajaba en una compania de seguros. Viajaba por esa desolada carretera porque debia ir a una convencion. Las convenciones de aseguradoras eran bastante aburridas y el habria preferido no ir pero su jefe habia sido muy claro. Debia ir si queria conservar su empleo.Manuel era un hombre muy raro. Le tenia pavor a casi todo. Siempre comia cosas heladas porque temia que la estufa explotara y amarraba su refrigerador a la pared con unas poleas de caucho muy resistentes porque temia que se cayera y lo aplastara. Manuel tambien creia en fantasmas, brujas y todo eso. Viajar en un camino desolado, obscuro y tenebroso era casi lo peor que le podia pasar. Pero el se lo habia buscado. Manuel tambien le tiene miedo a los aviones, por eso cuando se entero del viaje ni le paso por la mente irse en un avion. Por eso se fue con un dia de adelanto para llegar a San Isidro en la manana que empezaba la convencion.Un rayo cayo muy cerca del auto de Manuel. Esto lo sobresalto tanto que casi pierde el control del vehiculo, pero no lo hizo. Siguio por el camino deseando que esto acabara pronto. En ese momento recordo algo que su papa le habia dicho hace unos meses. Manuel y sus padres estaban hablando de lugares para las vacaciones familiares y la ciudad de San Isidro habia sido una de las cantidatas favoritas, pero el padre de Manuel habia dicho que no. Cuando Manuel y su madre le preguntaron porque; el habia dicho:-Nos tomaria mucho tiempo llegar en auto. Yo quiero que viajemos en auto a nuestro destino, para acercarnos mas como familia. Y no es tanto la manejada pero iriamos de noche en ese camino. Mi amigo Moncho me cuenta que esta embrujado y la verdad no quiero correr el riesgo.- Esto asombro mucho a Manuel ya que su padre no era de los que creen esas cosas.-No creo que sea nada grave.- Dijo Manuel -Lo es, es muy grave. Moncho dice que cuando vas a la mitad ves una hermosa joven que pide un aventon. Hay gente que se lo da y ella pide que la lleven a su casa y cuando la dejas en la puerta de su casa ella desaparece. Se dice que murio hace muchos anos y que esa era su casa y que ahora intenta volver. Tambien hay un motel, la duena es una bruja. Ella toma las almas de quienes se hospedan alli. Y muchos otros fantasmas mas. No podemos ir alli de noche!Una gota de sudor frio se formo en su frente al recordarlo. Si hubiera sido cualquier otra persona la que le hubiera dicho eso, talvez no tendria tanto miedo, pero fue su padre. El no creeia en esas cosas y siempre reganaba a Manuel por creerlas. Eso lo hacia cierto.Manuel podia ver algo enfrente de el, algo blanco. Cuando estuvo un poco mas cerca vio que era una hermosa joven vestida de blanco pidiendo un aventon. En ese momento todo se volvio mas obscuro y el tiempo parecia pasar mas lento. Manuel acelero y paso atraves de la joven aunque el no lo sabia. Creyo que la habia atropellado. "No, no puedes atropellar a un fantasma", penso. "Pero y si no lo es? Y si mi papa solo se invento eso porque no queria ir a San Isidro?" La duda lo estaba matando. Asi que, contradiciendo todo sentido comun, regreso al lugar del hecho. Sabia cual era porque habia un gran roble en esa parte del camino. Todo parecia normal, no habia nadie atropellado ni nada. De pronto Manuel vio algo en el retrovisor.Era el rostro de una joven, talvez la misma de antes. Pero habia algo en su rostro que no era normal, ni hermoso. Dos colmillos enormes y blancos. Eran tan blancos que la luna se reflejaba en ellos y le daba una luz siniestra y mortecina al rostro de la joven. Sus ojos eran negros, tan negros que el cielo de la noche parecia palido. Pero Manuel no los miro, porque el sabia que podian hipnotizarlo. Ella se acercaba a la ventana cada vez mas. Manuel acelero. " Supongo que a Moncho se le olvido la parte de que es vampiro". De pronto miro atras y la vio. Ella lo seguia! Y estaba, volando? Gotas de sudor frio y nervioso empezaron a caer de su frente. Su respiracion se volvia cada vez mas pesada y tenia un nudo en el estomago. "Yo y mi maldito remordimiento", penso Manuel. Siguio manejando a la velocidad maxima y viendo para atras a ver si ella lo seguia y asi fue por varios minutos pero de repente ella se esfumo.Y Manuel pudo ver el rotulo fosforecente que decia:Bienvenido a la Ciudad de San Isidro.Manuel nunca supo explicar que fue lo que paso aquella noche, pero ahora toma aviones para ir a las convenciones, aunque se la pase gritando que se va a morir todo el viaje.

Fuente: http://relatos.escalofrio.com

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